martes, julio 22, 2008

UN COMENTARIO SOBRE LA TRAGEDIA NEW´S DIVINE


JORGE ANTONIO DÍAZ MIRANDA
2008


1. El 20 de junio de 2008 la policía metropolitana del Distrito Federal y más de 100 granaderos irrumpieron en la discoteque NEW´S DIVINE ubicada en la delegación Gustavo A. Madero. Sin un trabajo previo de inteligencia, sin un plan operativo, con el puro argumento de la fuerza, la policía irrumpió en el lugar, violentando los derechos humanos de 600 jóvenes ahí reunidos. Con una demostración exagerada de fuerza los efectivos de seguridad pretendían capturar "evidencia viva" de que en el antro se distribuían bebidas alcohólicas a menores de edad. En virtud de esa razón un grupo de efectivos entró a la disco y empezó a agrupar a los jóvenes para hacerlos salir. Otro grupo se apostó en la entrada para impedir cualquier intento de fuga. Entre ambos grupos empujaron a los jóvenes a una situación de pánico. Sin una coordinación evidente los efectivos presionaban en sentidos opuestos quedando en medio cientos de jóvenes lo que derivó en 16 lesionados y doce muertos por asfixia. Por si no fuera poco, de forma arbitraria fueron detenidas y fichadas cerca de 500 personas la mayoría menores de edad. Lo anterior constituye una muestra de la incapacidad policiaca, de los mandos, de los responsables de la seguridad, y la omisión imperdonable de todos los funcionarios involucrados lo que alcanzó al jefe de gobierno y a su procurador de justicia Joél Ortega. Lo peor vino después, las declaraciones, las explicaciones y las verdades a medias de Marcelo Ebrard y Joel Ortega que en todo momento minimizaron la tragedia y descalificaron las críticas y los cuestionamientos. Sin embargo, ese estilo de enfrentar los errores de conducción y desgobierno - con excusas, mentiras y descalificaciones - constituye una evidencia de la ausencia de legalidad con la que actúa el gobierno tanto en su dimensión federal como estatal. Las diferencias ideológicas no son significativas en las formas concretas de operación ineficiente.

2. No es la primera vez que un operativo de la policía metropolitana del Distrito Federal termina en tragedia, y menos aún el hecho que pone en evidencia la incapacidad logística, operativa y de coordinación que a la postre terminará cobrando la vida de personas inocentes. Fuera de todo lo que encierra la dimensión jurídica en cuanto a su proyección política o social, este nuevo hecho acumula evidencia sobre la precariedad de los servicios de seguridad en el ámbito de lo civil y de los responsables que debieran como misión primordial garantizar la integridad fisica de los ciudadanos. No es tenor de este blog unirse a las exageraciones con las cuales los políticos y los mass media denostan un gobierno que consideran adversario con el conocido artilugio de encubrir las fuentes de todos los males, por lo menos en México: la corrupción. Pero lo que si quiero señalar es la repetición de los errores que el jefe de Gobierno Marcelo Ebrard y sus cercanos colaboradores cometieron al negar, minimizar y ocultar la verdadera dimensión de la tragedia en la discoteque New´s Divine, poniendo sobre la mesa patéticos argumentos exculpatorios en vez de adelantar trecho en contra de la corrupción de funcionarios públicos, dueños y operarios de estos servicios de entretenimiento. Pero no, el gobierno del Distrito Federal se empeña en castigar solo a los mandos policíacos involucrados, efectivos y personal del ministerios público, aprovechando además los medios de comunicación para lavar imagen sin ninguna sensibilidad para el sufrimiento de las familias con sus 12 adolescentes muertos y más de 150 fichados. Es decir, más de lo mismo en esta viña saqueada por el mejor postor, lo que, en definitiva pone de manifiesto, una vez más, la ausencia de la legalidad en todos los ordenes de la vida social en México. Porque la imagen es más importante que las victimas, las plabras huecas más significativas que los datos duros, la lealtad más importante que la capacidad, la disciplina fundamental aunque sin mediación del razonamiento.

3. Cuando decimos que no hay legalidad en México estamos diciendo que no hay límites para las estructuras de poder y por tanto, su actuar tiende en los hechos hacia la arbitrariedad. El enorme vacío de normas es una situación propicia para el abuso y el torcimiento del Derecho provocando el desencuentro entra la legitimidad y la justicia, entre el cumplimiento de la ley y la equidad, entre la legalidad y su función de prevenir-proteger, más otros efectos derivados como la desigualdad, el desamparo individual frente a la fortaleza institucional, y, la corrupción por supuesto. Diganlo si no los Fox y su historia de abuso de poder, el actual secretario de gobernación Juan Camilo Mouriño con los contratos millonarios de PEMEX fundados en el tráfico de influencias, los pederastas en libertad, las televisoras (TV Azteca y Televisa) pisoteando derechos de información y tergiversando la realidad en arás de sus intereses, el narco infiltrado en el aparato de gobierno, el cinismo de Elba Esther Gordillo, los sobreprecios y abusos de TELMEX, las riquezas injustificables de líderes sindicales (PEMEX, Mineros y SNTE), El fraude electoral de 2006, las declaraciones ofensivas de la secretaria de energía Georgina Kessel al despreciar el debate petrolero y la consulta, el racismo de panistas, la voracidad de priístas y el divisionismo del PRD; y para protección de todos la Suprema Corte de Justicia de la Nación que convalidad con base al Derecho la deformación de la justicia.







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