FOTOGRAFÍA DE MIDDLE EAST ON LINEEn un nuevo capítulo de maldad y cínica perversidad, el gobierno israelí justifica sus ataques a zonas habitacionales civiles, con bombas inteligentes desde poderoso aviones supersónicos, con el cliché de que Hamas está utilizando esos lugares como almacenes de artillería y emplazamientos de proyectiles kazam. El asedio de grupos poblacionales no debe ser interpretado como errores del funcionamiento de las armas empleadas, sino como parte de un premeditado plan expansionista que el Estado sionista venía meditando desde hace tiempo contando con el apoyo de los Estados Unidos. La operación Plomo Endurecido es a todas luces y desde cualquier perspectiva de análisis político, una estrategia de presión para el mundo árabe, el gesto más terminado de las aspiraciones imperiales de lo Estados Unidos de hacerse del control de la zona, utilizando a Israel como ariete, con lo cual, se busca provocar una reacción de Siria, Irán o Libia, y tener el pretexto para una intervención directa. La ola de terror moderno se ha emancipado de cualquier argumento ético, las máscaras han cedido ante el embate del verdadero poder. La sed de dominio y la carrera de los grandes negocios elimina por medio de la violencia extrema a los enemigos reales o imaginarios, y todos aquellos civiles que tienen la mala suerte de estar en el lado equivocado. Hoy más que nunca los peores terroristas son los Estados de Israel y el de los Estados Unidos; al Qaeda frente a estos no es más que un enano con ínfulas que da golpes certeros de vez en cuando. En esta guerra que ya dura más de veinte años se abre una nueva herida de dolor e impotencia que traerá consigo nuevas cuotas de venganza y odio por la forma alevosa conque Israel actúa, desde un poderío inmenso que es empleado sin piedad y cuyos efectos son atroces. Hoy Lunes 05 de enero las agencias internacionales de noticias reportan el dato de 600 muertos y entre ellos más de cien niños abatidos con armas sofisticadas. Las fechas y el lugar de la matanza perpetrada sugieren un significado claro: se trata de la nueva matanza de los inocentes con que el criminal Estado de Israel aplasta en sangre un territorio soberano de apenas 362 Kms cuadrados, castigando a una población de 1 millón y medio de personas con una tempestad de plomo derretido que funde la piel y evapora la sangre. Y como de costumbre la ONU no puede parar esta masacre por el veto estadounidense en el Consejo de Seguridad. El gobierno de Israel está profundamente equivocado al considerar que la seguridad de su territorio depende de su poderío militar, no habrá ningún triunfo y sí la continuación de un conflicto que alcanzará tarde a temprano a los ciudadanos de Israel en cualquier parte del mundo. Eso es el costo lamentable de tener un gobierno corrupto que trata de compensar sus tropelías desatando el armagedon entre sus vecinos más débiles.
1 comentario:
Que regalo de reyes nos has dado.
Leer las atrocidades que ocurren en un país lejano al nuestro por un momento nos hace sentirnos a salvo, pero reparamos el error al instante cuando nos damos cuenta que para hacer daño la distancia no existe.
Comentar sobre situaciones que involucran la muerte de niños, es fácil y más cuando nuestros sentimientos son los que hablan. Opinar sobre la situación de este país que ha estado en guerra por cien años; algo a si como un mal crónico; que inicia por religión y continúa por política. (Que al final la religión y la política van de la mano, donde el premio es “El poder”; El poder joder al que se te antoje sin reclamación alguna).
Es lamentable pero hay intereses por encima del pueblo, es una guerra que no quieren que termine y ni permitirán que termine, tiene un odio muy arraigado por generación con el que justifican toda acción y como dices, con estas nuevas muertes siguen alimentándolo.
Y ese mismo odio no les ha dejado avanzar, y si les a permitido incrementar el avance de la economía a países creadores de armamento.
Estados Unidos no dejara su minita de oro, ni otros países si estan involucrados, nadie quiere perder su fuente de ingreso. ¿Verdad? Y así, volvemos a lo mismo, todo gira entorno al dinero. Y cada quien tiene su parte del pastel.
Lamentablemente las matanzas de gente inocente no tienen ni para cuando acabar. Es una guerra interminable, sin esperanza.
Al final del día, los que se dicen ser buenos son reeeeemalos y los malos no resultan ser tan malos, solo medio brutos.
Ojalá esté en un error.
Publicar un comentario