BY
JORGE ANTONIO DÍAZ MIRANDA
2008
Para toda la momiza sexagenaria que se solaza en estos días, con un infausto aniversario más del movimiento estudiantil de 1968 en México. Aniversario relacionado con la fecha fatídica del 02 de octubre en que el gobierno del tíosimio Gustavo Díaz Ordaz impuso a las armas nacionales la deshonra del ataque por él ordenado contra civiles desarmados... A esos revoltusionarios del cazzo atrapados en la nostalgia estalinista, quiero manifestarles mi repudio, y ello a la luz de sus acciones postreras (que sólo ha servido para rehabilitar, in$titucionalmente hablando, su fallida vida política universitaria), en las que de forma infame han tirado por la borda la oportunidad histórica de elaborar un programa serio de izquierda en oposición al poder, para sólo engendrar un monstruo tísico, amarillento-enfermizo y acrítico denominado PRD. En virtud de lo antes dicho solicitaremos al Santo Oficio del PAN que borre de los libros de texto su movimiento de lumpen-pseudo-intelectuales-proletarios, en el que nadie más que ustedes creyeron eso de que estaban haciendo la Revolución. Lo siento joys pero el tren ya se les pasó, además de que ustedes se han ido acomodando en los márgenes de la mediocridad clasemediera cacareando cada año su desmedida aventura como si las futuras generaciones les debiésemos algo. ¡Que azotados¡. Además, y con todo respeto para los caídos que fueron muchos, los primeros en practicar alzhaimer de conveniencia política han sido ustedes -salvo escasas y honrosas excepciones-, con el cinismo de ajustarse al sistema corrupto. Presentándose luego, en la palestra de las divas políticamente correctas, como reformadores de algo que ya no tiene ni tendrá solución...y de lo que ustedes han sido participes y beneficiarios. Y si aún les queda el cinismo para defenderse con el argumento de que la UNAM es su legado póstumo, más vale que se abstengan porque en muchos sentidos esa casa de estudios podrá vivir incluso sin vuestra incómoda sombra...además esa institución hace mucho tiempo que perdió la brújula de las causas justas. ¡Ustedes no representan a nadie, ni fueron más inteligentes, ni más duros, ni más dignos¡. Así que al muerto las coronas, soltad la prenda de vuestra falsa virginidad que ya sólo es materia de onanismo senil¡. Amén.
5 comentarios:
Hola Lucia: mas que el articulo, me gusta mucha mas esta revista por los otros numeros. Sin embargo sólo tengo para un pequeño comentario: "Revivir el 68 es como practicar la necrofilia".
Realmente me da tedio y enojo al final. A los jovenes no les debe interesar. Lo que buscan los sesenteros es que haya un bono monetario por haber estado en Tlaltelolco, o una a plaza de los caidos del 68 y ya como sucede en muchos lados. Los mexicanos estamos acostumbrados a pedirle demasiado a la virgen de guadalupe y al estado. No acostumbramos a exigirnos a nosotros mismos. La esperanza sólo es castigo del diablo segun Goethe. Estoy de acuerdo con Diaz Miranda: los sesentaocheros, vivieron su época y.. no hicieron nada mas.
Un beso donde andas?
Jaime
Jajajajaja!!!
Dice Daniel que ¿Quien es el Azotado?
si el o los de las marchas del 68
jajajajaja!!!
Bechos!
Jack.
RESPUESTA EL DÍA 7 DE OCTUBRE 2008
Debe ser una Verdad de Dios que el '68 se rememora sólo en México. Nunca en estos últimos 40 años he oído jamás, por ejemplo en Italia, un comentario que refleje siquiera pálidamente la existencia de tal fecha.
Sea como sea aprovecharé este foro para recordar en breve qué pasó en octubre del ’68 en el Norte de Italia. Yo no fui a las calles, me arrastraron los alumnos que tenían algunos años más que yo; nos sacaron de las escuelas secundarias los alumnos del liceo científico, ni siquiera de la Universidad, dado que en Gorizia (Friuli Venezia Giulia) no hay universidad; se colaron adentro de las aulas trepando por las ventanas, dado que en mi "Instituto Scipio Slataper”, la directora eslovena, no estaba de acuerdo con el movimiento. I “carabinieri” tardaron sólo algunas horas para dispersarnos con toneladas de gas lacrimógeno. La paradoja que le veo ahora a este movimiento tiene tintes patéticos. Lo que pedían los “muchachos grandes” era que se construyera una central atómica: el proyecto estadounidense: “PROTOSINCROTONE” (o algo así), para tener un trabajo bien pagado en este lugar, ya que en Italia no había aún centrales atómica en la costa del Adriático.
Ahora bien, desde hace más de veinte años es de dominio común saber los serios problemas causados por el desmantelamiento y aniquilación de las centrales que aún quedan (Cernobyl e &). Por lo tanto, lo que pedía este movimiento está considerado no sólo desplazado, sino fuera de toda mesura y realidad. En este sentido, todos han contribuido a olvidar este movimiento estudiantil y las absurdas pretensiones, (amén de ser ignorantes de lo que podría desencadenar la construcción de una central nuclear).
La pregunta es la siguiente: ¿qué motiva en México el alboroto del 2 de octubre, el festejo con sus desfiles, los artículos en los periódicos, la polémica desatada en contra del gobierno “criminal” y del ejército “asesino”? No tengo la información suficiente, ni la autoridad para desacreditar un “falseado movimiento” que sigue patéticamente su rito conmemorativo, sin embargo puedo atreverme a interpretar algunas de las causas que lo mantienen vivo.
Podría ser que esta conmemoración se retroalimenta con el rencor despiadado de las madres y de los padres --vivos/as y “muertos/as”-- de aquéllos miles de hijos asesinados y sepultados en una fosa común; podría ser que las hermanas/os de aquéllos seres, los amigos/as, los familiares y aliados sean los que levantan aún sus pancartas y lienzos para manifestar el repudio visceral a la impunidad de supuestos “asesinos” con licencia para matar. Tal vez en lugar de festejarlo el 2 de octubre se debería esperar el 2 de noviembre.
Lo que se rememora, desde mi desinformada percepción, no es en absoluto una reivindicación (sindical o del “cazzo”, da lo mismo), sino una y otra vez la frustración y el dolor patológico de los oprimidos que guardan un recuerdo (aunque ahora tengan tele, CD, DVD e incluso la compu). Tal vez haya en el movimiento algunos profetas del “cazzo”, cuya pretensión -bajo la bandera “comunista” de manifestarse-, es la de sacar provecho de la desgracia ajena.
En esencia, pues, en México, -desde mi opinión-, esta fecha tiene su punto de arranque en el dolor y el rencor, y a los “imperturbables” jóvenes del “cazzo” esto le causa repulsión, porque no han entendido que son los hijos de aquél dolor y de aquélla represión. No quieren, pues, reconocer la derrota de sus propios padres, el dolor y las lágrimas engullidas de sus madres, los litros de bilis tragados por los amigos y familiares. Los que ven un culto a la necrofilia o a la virginidad de ideas ya corruptas, están más perdidos que aquéllos, pero, sin dudas ambos (los seniles onanistas y los pujantes buscacoños) son parte de una misma realidad: los primeros cayeron queriendo cambiar la política, los segundos han crecido y se han alimentado de este fallido cambio, ¡!!con todo y cadáveres!!!.
Pero, ¡!!alto allá!!! No quiero caer en otro tipo de proselitismo que favorezca a los “seniles alzheimer”, no defiendo mi causa perdida, no defiendo ni ataco a nadie, sólo quiero señalar mi punto de vista, como cualquier otro.
Marina Julia.
Luego te escribo con calma, porque por ahora ando apurada, pero creo que en
parte,tiene razón el escrito, cada quien enarbola el suceso como mejor le
conviene, ahora es lo que está haciendo el gobierno, dizque defiende el
movimiento y condena la represión, cuando está reprimiendo movimientos sociales
por todos lados. Todo sigue igual (bueno, no tanto, pero el gobierno sí, sólo
que ya se cuida un poco más de aparentar. Y habrá quien se vanaglorie de haber
estado en la lucha, y está sentado en sus laureles desde entonces; o creee que
lo sabe todo. También es cierto que a los jóvenes los aburrimos con nuestra
nostalgía de la época del peace and love, como si no pudiéramos reconocer lo
que ellos son o hacen, como si fueran incapaces de alcanzar las alturas de lo
que se dio en los sesentas. De todas maneras, como de todas los movimientos
sociales y de la historia, debemos seguir analizándolos y exhaltándolos, no
darles carpetazo, como parece ser que quiere "tu colega" (así dijiste). Porque
también han surgido aquí en México grupos de ultraderecha que les ha dado por
negar la historia, como algunos que dicen que Hidalgo era un pendejo que ni
sabia nada ni valía nada y todo es un invento; también de Morelos;
descalificándolos con una soberbia; y hay otros que dicen que ni es para tanto
lo del movimiento del 68, que no murieron tantos muertos en Tlatelolco, otros
incluso que no es cierto lo de la matanza, que no hubo matanza. ¿Cómo ves? Al
estilo de los neonazis en Europa, que niegan que hubo campos de concentración y
exterminio de judíos, que todo es un invento. ¡AGUAS CON LA DERECHA!!!!
Por cierto, yo tenía 13 años en 68 y prácticamente y no entendí nada ni me di
cuenta de la magnitud del movimiento, ni vi ninguna marcha, aunque vivía cerca
de CU, te puedo hablar más de las Olimpiadas, aunque ciertamente tengo algunos
recuerdos de los rumores que corrían en la escuela. Pero, en efecto, siempre ha
estado presente en nuestra vida el 68, desde la prepa, la universidad, etc., de
modo que casi siento que yo estuve en el movimiento, y en realidad, también
podría decir que sí estuve, porque siempre he estado con los estudiantes y su
lucha social, etc. etc. etc.........
Un beso.
Gabriela
Yo creo que el movimiento del que tú hablas en Italia no tiene nada que ver con el movimiento que hubo aquí en el 68, absolutamente nada. También creo que quieres ver lo que no hay cuando uno recuerda el 68. Se recuerda no sólo la matanza de Tlatelolo, sino todo lo que fue el movimiento, un movimiento que se
dio en favor de las luchas sociales, de la democracia, por la libertad de pensamiento, por la libertad de los presos políticos, por la libertad de prensa, por la libertad de los luchadores sociales presos, en defensa de la
autonomía universitaria, por una educación para todos, y en contra del autoritarismo y de la represión, de la intervención de la policía en Ciudad Universitaria..., etc. La matanza es la prueba más patente de la represión política y social en nuestro país, de la única forma de diálogo que estaban
dispuestos a aceptar. Etc. Etc. Recordarlo, como se recuerda a los luchadores sociales muertos, no es por necrofilia ni ningún tipo de culto a la muerte, se
recuerdan para exaltar los valores que ellos defendieron o las libertades que hicieron posible. Se recuerda la historia para pedir que no se repitan los errores y los horrores cometidos.
Yo no estuve en el 68 ni estuve en la guerra, pero sí desearía que nunca se repitan. Desgraciadamente yo no soy la más indicada para informarte más a fondo
porque no estoy muy informada, pero te aseguro que hay muchisísima literatura
al respecto, de gente que estuvo y otros que no estuvieron pero que están bien informados o se dedican a eso. De lo que no me cabe la menor duda, es de qué
lado estoy: estoy por la libertad, por recordar a los caídos en el 68 y por recordar siempre la historia. Ahora me tengo que ir porque tengo mucho trabajo.
Luego nos comunicamos.
Gabriela
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