sábado, agosto 09, 2014

SUPER SIZE ME




SUPER  SIZE  ME


JORGE ANTONIO DÍAZ MIRANDA
Agosto 2014


En su tiempo esta película causó agruras a las grandes cadenas de comida rápida en todo el mundo y muy particular y acentuadamente en los Estados Unidos. El documental de Morgan Spurlock parte de una pregunta básica: ¿qué tan nutritiva es la comida que sirven en McDonalds, con su dotación de frituras, aderezos, refrescos, complementos, chicken Cajun, grand big Mac, mcwraps, CBO´s, postres y helados, happy meal, gazpachos, nuggets, frappes, quesos derretidos, summer box? 


Para responder a tal pregunta el mismo Spurlock se somete a una dieta de un mes alimentándose solamente con hamburguesas y menú de la famosa cadena de los arcos amarillos y el payaso Ronald. Previo a atentar contra su integridad física, Spurlock se somete a check-in con una nutrióloga, un médico, un fisiólogo y una dietista, para establecer una línea base de indicadores vitales que parecen ser perfectos, en términos de su edad, talla y peso corporal. 


En esas sesiones previas, los especialistas perfilan el tipo de consecuencias que ha de enfrentar el cobayo humano tras en su experimento personal de exponerse al aglutinado y congestionado paraíso de conservadores, colorantes, grasas saturadas, gas, azúcar, clembuterol, aspartane, sazonadores artificiales, antioxidantes, emulsificantes, estabilizadores, hormonas, espesadores, enzimas, aditivos, blanqueadores, maduradores, humectantes, texturizadores, reguladores de PH, re hidratación, modificadores, salinizadores, acidificantes, antibióticos, gelificantes, solventes, clarificadores, homogeneización, nitratos, espumantes, edulcolorantes, purificadores, neutralizadores, encurtido, híper refrigeración, procesamiento químico, embutido, etc., que de inmediato comenzará a colapsar sistema por sistema, el funcionamiento de hígado, riñones, páncreas y estómago. Es decir, un agresivo cóctel de carbohidratos y triglicéridos que, potencialmente pueden dejar secuelas que aceleren el envejecimiento con cuadros hórridos de enfermedades adquiridas, crónicas, degenerativas, devastadoras. 

 
No obstante lo anterior, Spurlock lleva a cabo su happening de McTrios, Jumbos, Combos especiales, Mega paquetes, súper ensaladas con aderezos grasientos, frituras de aves envejecidas, carne de dudosa procedencia, papas fritas saturadas de grasa, refrescos con 57% de azúcar, sopas instantáneas, pastelillos híper azucarados, harinas refinadas, etc., con el propósito de ofrecer al público evidencias de primera mano sobre la responsabilidad directa de McDonalds en la epidemia de obesos, diabéticos, hipertensos, coronarios, asmáticos, anorgásmicos, depresivos, irritables, adictos a la comida rápida, ansiosos, fatigados, cancerosos, disminución de la percepción visual, desnutridos, impotentes, avejentados prematuros, híper sudoración, flatulentos, bulímicos con fallas renales, visión borrosa por inflamación de nervios visuales, comezón, mal olor, deshidratados, con deterioro cognitivo, perdida de la realidad, alteraciones de sueño, convulsiones, nauseas, esclerosis múltiple, insomnio, migraña, taquicardia, destrucción de tejido cerebral, atrofia de hígado y riñones, vaginismo, alergias, diarrea, dolor abdominal, esterilidad, demencias,  agresividad exacerbada, inestabilidad emocional, caries, osteoporosis, cólicos, embolias, miopía, reumatismo, endurecimiento de arterias, opresión de músculos de la cara con una expresión rígida por la pérdida de movilidad muscular, incremento acelerado de grasa corporal,  … y lo más drástico: niños con estos cuadros agresivos que se vuelven crónicos, retrasando o incluso deteniendo su desarrollo sano. A ocho años de su realización, aún es útil revisar esta película pues con un realismo demoledor pretende informar al gran público sobre los riesgos de los hábitos y vicios de la modernidad que siguen vigentes, y además protegidos legalmente por los gobiernos como el de Estados Unidos, que incluso, emitió una enmienda de protección para que los ciudadanos nunca puedan demandar a ninguna cadena de comida rápida sobre los efectos iatrogénicos y patológicos de la chatarra procesada que venden como si fuera verdadero alimento.

En síntesis: ¡it´s a fucking big one sheet, man¡.



¡Niños, véanla con sus papás para que no sigan evadiendo su responsabilidad de informarse para educaros¡  

Abajo, el documental completo. 


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