Obituario. Muere Carlos María Abascal, empresario y ex titular de las secretarias del Trabajo y de Gobernación en el accidentado sexenio del bipolar Vicente Fox (Sacra Rota Romana, dixit). De oscuros vínculos confesionales con el Yunque, funcionario de talante lúgubre y desempeño gris, además de reivindicar las relaciones carnales entre el poder público y los negocios, se dio a conocer por las controversias que levantó al prohibir a su hija la lectura de Aura, mini novela escrita por Carlos Fuentes, y hacer intervenir de una manera abusiva su poder para despedir a la maestra que se atrevió a sugerir esa lectura en una escuela privada de clara orientación católica. Luego está el asunto de ser nombrado arbitro en las relaciones obrero patronales con una clara tendencia hacia los segundos. Sin dejar de mencionar el vergonzante silencio de Abascal ante los escándalos de pederastía clerical cuyos acusados más visibles fueron el Obispo Primado de México Norberto Rivera Carrera y el legionario Marcial Maciel. Además de sus comentarios desinformados sobre las mujeres asesinadas en Ciudad Juárez haciéndo fea consonancia con su jefe, el desbocado Vicente Fox. Y finalmente el perjurio en el que incurrió el ex secretario al desatar la represión sobre el movimiento magisterial de Oaxaca y orquestar estrategias de Guerra Sucia para apresar a Flavio Sosa y otros líderes mientras se desarrollaba el dialogo en la Secretaria de Gobernación. Según el registro oficial se trata de un hombre de principios y acciones, de convicciones firmes y una trayectoria política destacada. Desde el Presidente Felipe Calderón hasta los diputados y senadores de todas las fracciones coinciden en esta versión. Sin embargo con ello demuestran su capacidad de olvidar los profundos errores del ex funcionario, su sectarismo y el desconocimiento de la realidad nacional; factores que promovieron la agudización de la situación interna del país en rubros como seguridad, reformas políticas, democracia y desarrollo social. Esa fue la realidad de este Caballero de Colón de la triste figura, arribista y acomodaticio, tan alejado de la sombra combativa de su padre, Salvador Abascal, que militó en las falanges de una derecha de verdadera oposición al poder central del presidencialismo revolucionario, auque proclive al franquismo y al catolicismo fundamentalista.
Confieso que no soy gran conocedora de política ni de políticos, pero a raíz de leer lo publicado en este blogs sobre Carlos María Abascal, me di a la tarea de localizar información sobre él.
ResponderBorrarY dije- ¡¡Chispas!!
Unos lo consideran “Amigo de Dios” y otros un “Imbécil Solemne”.
Y de toda la información que encontré, Me gusto este Obituario. Lo describe muy bien.