ORDALÍA
JORGE ANTONIO DÍAZ MIRANDA
(MÉXICO, JULIO DE 2007)
Yo miro el mundo/
La sombra del mundo/
Veo cosas más allá del momento/
Veo mi ausencia gritar su vacío/
Pesa sobre mi el desarraigo/
Y por eso deambulo extraviado y sólo por los caminos/
Llegar a mi casa en llamas /
Y acostarme en mi lecho frío/
Sentir la voz de mi silencio/
Y no entenderlo/
Quedarme dormido, profundamente/
Y soñar con el suave murmullo del mar/
Despertar en la sombra/
Y mirar amancer del mundo/
Sentir la agitación del tiempo/
E imaginar días que vendrán/
Volver al camino para buscarme/
Mientras la vida dure, y seguir errante hasta fin/
La sombra del mundo/
Veo cosas más allá del momento/
Veo mi ausencia gritar su vacío/
Pesa sobre mi el desarraigo/
Y por eso deambulo extraviado y sólo por los caminos/
Llegar a mi casa en llamas /
Y acostarme en mi lecho frío/
Sentir la voz de mi silencio/
Y no entenderlo/
Quedarme dormido, profundamente/
Y soñar con el suave murmullo del mar/
Despertar en la sombra/
Y mirar amancer del mundo/
Sentir la agitación del tiempo/
E imaginar días que vendrán/
Volver al camino para buscarme/
Mientras la vida dure, y seguir errante hasta fin/
Mientras perduren en la "mirada" los colores del mar y del cielo que fueron el escenario tangible de la luz y no de la sombra, hay esperanza...
ResponderBorrarEn cambio los encuentros del ayer...pueden tornarse en búsqueda de un distinto hoy.
Hoy la búsqueda no se detiene en los colores, sino en los encuentros...
Y perdurarán, asi como los mejores momentos, cuando éramos sin importarnnos el futuro, cuando sentiamos sin detenernos a reflexionar sobre inconveniencias,cuando a la luz de los días la danza y la poesía desplegaba su luz no obstante la oscuridad que nos cercaba.
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